Nutrición: Cuida la alimentación de tus animales de compañía

4 factores para cuidar la alimentación de tu animal de compañía

1.- Conoce a tu animal de compañía

 Identifica las características y necesidades de tu animal de compañía: especie, raza, sexo, edad, peso, estado de salud, si padecen alguna enfermedad hay requerimientos nutricionales específicos que debes cuidar.

Un cachorro que realiza una gran actividad física no necesita lo mismo que un perro mayor de 10 años con baja actividad.

Un gato de 3 años sano tampoco necesita la misma alimentación que un gato que padece alguna enfermedad crónica.

2.- Características del alimento

Existen muchas opciones de alimento para perros y gatos en el mercado, como: alimentos De valor, Premium y Superpremium, dependiendo de su calidad nutricional.

Hay alimentos que se pueden clasificar como húmedos o secos, dependiendo del porcentaje de agua que tengan los mismos.

Acude al médico veterinario, quien recomendará la mejor opción de alimento, basándose en factores como cantidad de proteína, fibra, carbohidratos, vitaminas, así como la ración adecuada para cada animal de compañía.

También, están los alimentos de prescripción médica veterinaria que dan el aporte nutricional indicado a razón de que padezcan alguna enfermedad en particular, esto claro, tras una evaluación clínica adecuada.

3.- Manejo y forma de proporcionar el alimento

La forma de proporcionar el alimento depende de las características, el tipo de alimento y los hábitos alimenticios de nuestros perros y gatos.

Existen dos esquemas de alimentación que pueden ser usados en perros y gatos:

• Alimentación libre: consiste en dejar el alimento a libre acceso durante todo el día. Los animales de compañía pueden comer a la hora que quieran y la cantidad que deseen. Este esquema puede resultar benéfico para los gatos, ya que su estómago tiene una capacidad diferente al de los perros, por lo cual, tienden a comer varias veces al día, en pequeñas cantidades. Una desventaja de ofrecerles comida de manera libre es que podría resultar en problemas de obesidad.

• Alimentación de ración controlada: el tutor puede brindar una o más comidas racionadas al día. Esto ayuda a tener un control sobre el consumo de alimento, así como detectar a tiempo los cambios que puedan notarse en nuestro animal de compañía en caso del curso de una enfermedad. Una desventaja que se presenta es que exige una demanda de tiempo al tutor ya que deben tener un horario diario establecido para darles de comer. Si cambias el horario, puede causar que coman con mayor rapidez y que puedan ahogarse o simplemente no consumir el alimento.

4.- Agua de bebida

Resulta fundamental proporcionar agua purificada a libre acceso, así como verificar que siempre esté limpia y fresca.

Este líquido vital no solo ayudará a la digestión de los alimentos, sino a que todas las células del organismo funcionen adecuadamente, siendo de apoyo en procesos vitales como la termorregulación.

Para mayor información, consulta nuestro número 3 de la revista “Huellitas en la comunidad” “Nutrición”