Debido a la combinación única de síntomas que presenta cada niño, a veces, puede ser difícil determinar la gravedad. El trastorno del espectro autista (TEA), es una condición genética con dificultades en relacionarse y comunicarse con los demás y en la presencia de unos pensamientos rígidos e inflexibles, pero la forma con la que estas dificultades se expresan pueden ser muy diversas. 

Entre sus síntomas están:

    ∴  Tardío desarrollo del habla.

    ∴ Dificultades en comprender situaciones sociales, interpretar intenciones y pensamientos de los demás.

    ∴ Poco contacto o escaso interés en las redes sociales. 

Es una limitación del desarrollo del lenguaje que afecta diversas áreas lingüísticas. Este trastorno puede afectar el habla, la capacidad para escuchar, la lectura y la escritura del niño. Un niño que tiene dificultades con el lenguaje puede evitar las interacciones, lo que conduce a que los demás piensen que el niño es tímido. 

Sus síntomas son: 

    ∴ Ausencia de lenguaje después de los 2 años de edad. 

    ∴ Dificultades en la comprensión lingüística. 

    ∴ Producción verbal inteligible.

Se trata de un trastorno que dificulta que el niño /a mantenga su postura contra la gravedad. A su vez, reduce la potencia muscular y retrasa la adquisición de habilidades motrices. 

Sus síntomas son:

      ∴ Mantener el equilibro en la posición que sea. 

     ∴ Lento en aprender a correr, saltar y subir escaleras.

     ∴ Dificultad en tomar una pelota y tirarla. 

     ∴ Tropezarse fácilmente.